martes, 21 de enero de 2014

La caída

Bruegel el viejo, La caída de los ángeles rebeldes

Ayer me tropecé de la manera más tonta. Ahora tengo una pierna escayolada y una herida leve en mitad de la frente. Ahora permanezco mucho tiempo sentado o tumbado y las horas parecen siglos que se encadenan sin fin. Ahora no sé que hacer con mi vida y reconozco que soy el peor enfermo del mundo. De la manera más tonta. Así sucedió todo. De una manera tan tonta que me da una vergüenza tremenda entrar en más detalles. Con decir que todo sucedió de la manera más tonta creo que todo está dicho. No hace falta más. No es necesario. Me pica. La pierna. Ahí adentro. Me pica de la manera más tonta y de la manera más tonta siento la imposibilidad de rascarme y de hacer frente a ese picor inmundo. 

jueves, 9 de enero de 2014

DENTRO-FUERA





En una carta de Louis Ferdinand Celine a su amigo Albert Paraz:
"Cuando no se tiene fuerza, 
no queda más remedio que hacer el payaso. 
Mejor sentado que de pie."