jueves, 26 de abril de 2012

ACARICIANDO LA LOCURA COMO SI FUESE UN GATO MORIBUNDO

Tal vez fue un jueves pero ya no lo recuerdo. Fumando y echando el humo sin gracia alguna. No puedes dejar de pensar en ello, me dijo con toda la razón del mundo. En el muelle, donde esperaba la barcaza. Estoy en la habitación en la que murió Marilyn. Aquel hombre saludaba agitando su mano derecha. El año de mi graduación, me compré una motocicleta roja. Las hojas de los robles danzaban formando remolinos.  Detrás, detrás del sofá, estaba el gato muerto, y la habitación apestaba. Si tuviese una cerilla prendería fuego al ascensor mientras subo en él. No me gustaría morir en la nieve, preferiría arder en el infierno. Colgué el post después de la cena. Nunca buscó alterar la realidad sino mostrar ciertos detalles. Más tarde, utilizó el cuchillo para untar la tostada. También me dijeron que no mirase hacia atrás. Bullimos. Ya dormido. El tren de cercanías está averiado. Cloaca.



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