Si estaba en la plaça Rovira en las siempre mal criticadas fiestas de Gracia, la gente va a lo que no hay que ir, pero ese concierto y el de Sabor de Gracia (homenaje al Gato Pérez) fueron una pasada. En el de Comelade tenía a Cassases a cinco metros y a Pau Riba a cuatro entre el público y en el de Sabor de Gracia a toda la plaça del raspall.
ya puestos podríamos construir un kaiserpanorama, me haría mucha ilusión. aunque no tengo ni idea de cómo hacerlo. me lo imagino redondo, tipo la atracción de los 400 golpes, pero en madera y con austrohúngaros algo serios. ¡hay madera, herramientas e ilusión! por cierto, hay también una grieta en el hemisferio sur.
qué alegría, amigos. ahora me ha venido a la cabeza un ídolo de mi juventud otoño-invernal: el gran ingemar stenmark.
la decoración de la plaza rovira era especialmente bonita, francis, se estaba muy bien allí. las cosas buenas tienen la capacidad de transformarlo todo y dejar una impresión duradera muy agradable. la tarde que descubrí aquello ho había casi nadie, sólo los vecinos sentados en las sillas plegables de madera. descubrí mi bar ideal. luego desapareció, pero entonces parecía siempre haber estado allí.
(Ordino, Andorra, 1970)
Libros: El triste festín (2002) Tras el pinar un grito (2007) y Dans la turbulence (2011), antología "El libro del voyeur" (Ediciones del viento, 2010).
alexnortub@gmail.com
6 comentarios:
Ya sabía yo que una mesa más grande era únicamente cuestión de tiempo... Lo malo (bueno) es que el espacio de más también lo llenarás...
Saludos.
En verano vi a Comelade en acción con una banda increible :
Pascal Comelade i l’Orfeó Metropolità de Sant Roc Conductor presenten Riffifí
39, tengo que construir una gran mesita de noche a mi medida, es cierto, se me quedaba pequeña. Pero me llevará tiempo.
Francis, viste a Comelade en las fiestas de Gracia? en agosto? Yo estuve allí! Fue buenísimo el concierto!
Si estaba en la plaça Rovira en las siempre mal criticadas fiestas de Gracia, la gente va a lo que no hay que ir, pero ese concierto y el de Sabor de Gracia (homenaje al Gato Pérez) fueron una pasada. En el de Comelade tenía a Cassases a cinco metros y a Pau Riba a cuatro entre el público y en el de Sabor de Gracia a toda la plaça del raspall.
ya puestos podríamos construir un kaiserpanorama, me haría mucha ilusión. aunque no tengo ni idea de cómo hacerlo. me lo imagino redondo, tipo la atracción de los 400 golpes, pero en madera y con austrohúngaros algo serios. ¡hay madera, herramientas e ilusión! por cierto, hay también una grieta en el hemisferio sur.
qué alegría, amigos. ahora me ha venido a la cabeza un ídolo de mi juventud otoño-invernal: el gran ingemar stenmark.
salud!
vk
la decoración de la plaza rovira era especialmente bonita, francis, se estaba muy bien allí. las cosas buenas tienen la capacidad de transformarlo todo y dejar una impresión duradera muy agradable. la tarde que descubrí aquello ho había casi nadie, sólo los vecinos sentados en las sillas plegables de madera. descubrí mi bar ideal. luego desapareció, pero entonces parecía siempre haber estado allí.
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